sábado, 30 de octubre de 2010

Bajar

Me pasa con frecuencia, cada vez con más: miro a un espejo y me sorprendo, porque espero ver a un chaval de unos veinte años, pero estoy yo.
Hace un par de días, en el metro, el cristal de una puerta me puso frente a mí. El túnel era largo y estaba iluminado, me dio por pensar que aquellas luces que huían eran los años de mi vida. Incluso me dije , como casi siempre hago, que escribiría un poema a lomos de esas imágenes, pero no ha sido así. A mí lado, frente al cristal de la otra hoja de la puerta, había una chica de unos quince años tan guapa que me hizo sentir culpable. Otro motivo para odiar a Sánchez-Dragó, pero como trato de explicar el tiempo pasa demasiado deprisa.

Cuando este verano el deseo me alanceaba, volví a comprobar mi torpeza y tendencia genética al pesimismo. Será mejor así, pienso, aunque no esté muy convencido - a los tímidos nos cuesta convencernos de las cosas-. Escribí, para aliviarme: "Hay puertas que es mejor no abrir" - o tal vez es malo no abrir las puertas, añado ahora sin convicción-.

Ayer estuve en la presentación del libro de Raúl Ariza "Elefantiasis", un libro excelente en todos los sentidos, si se me permite decirlo aunque el editor es amigo mío y lo será el autor - porque de Raúl no creo que se pueda ser otra cosa que amigo, salvo que uno sea abogado de la parte contraria, y aun así-.
Durante el acto tuve en todo momento la sensación de que aquel era mi mundo, aunque sea yo autor de un sólo libro, es más, aunque no hubiera escrito jamás en la vida una palabra, hubiera tenido la sensación de que aquel era mi mundo: desde siempre he sentido un respeto reverencial por la palabra y por sus orfebres.
Será que estoy pasando un mal momento en el trabajo, seguramente será eso, porque estoy acostumbrado a los trabajos de mierda, pero no me importaría nada vivir de la literatura, aunque eso no acabe de encajar en la rídicula idea que yo tengo de la pureza creadora y ayer, escuchando alguna conversación suelta, tuve la sensación que la literatura es la única vía de escape que me queda.

martes, 26 de octubre de 2010

domingo, 24 de octubre de 2010

Mininotas

1.- Hoy he soñado con una bloguera, Luna Carmesí, a la que jamás he visto. Es más, desapareció de la blogosfera hace tiempo...y yo he cenado esta noche con ella, su marido, una amiga y tres niños insoportables.
2.- Zapatero ha hecho desaparecer dos ministerios que se pretendían estandartes de su "socialismo", las titulares se enteraron con veinticuatro horas de antelación - y por teléfono-. Ni Bibiana Aído, ni Beatriz Corredor, con independencia de la valoración política que se hiciera de su gestión, merecían volver a modos tan parecidos a los del " motorista de El Pardo".
3.- Se inicia la campaña de vacunación de la gripe sin que a los laboratorios farmacéuticos les haya dado tiempo a inventarse nada para sacar más dinero al Estado.
4.- He vuelto a ponerme manta, ¡ qué bien! Me gustan las mantas y los tazones grandes de chocolate con nata.
5.- Me parece que en junio nos vuelven a bajar el sueldo: ¡ Viva la Administración!
6.- Me he comido dos merengues con canela.
7.- En Francia entienden la expresión "huelga general" y la llevan a cabo.
8.- No cesa el bombardeo de los propagandistas de la vida sana. Debería hablarse a fondo de todo esto y del negocio que apareja.
9.- La segunda parte de " El silencio de los corderos" me pareció francamente mala. Al menos, la primera tenía momentos entretenidos. Aunque Anthony Hopkins siempre sea un maestro de maestros.
10.- Me duele la espalda a las 8:55 del domingo 24 de octubre, y no es atribuible a la actividad sexual, que siempre es un consuelo para todos los dolores.

martes, 19 de octubre de 2010

Nihilista/Onanista/Surrealista

Yo no podría recitar un poema adecuadamente: no tengo voz ni entonación. Mis padres no quisieron llevarme a una escuela de arte dramático o al logopeda. Me hubiera gustado una voz como la de Jordi Boixaderas, tan recia. Me hubiera gustado mucho, pero no ha podido ser.

La semana pasada, cuando la nevada, traté de escribir un poema sobre los copos de nieve que pudiera ser recitado en un teatro: era tan malo que lo destruí en el triturador de papeles. No era una cuestión de voz, no, era cuestión de pereza y falta de inspiración, las grandes compañeras de todo el que trata de ser escritor sin esfuerzo.

En un escenario blanco, completamente blanco, deberían llevarse a cabo recitales de poesía de autores desconocidos. Los rapsodas podrían ser estudiantes de logopedia, algún actor en ciernes o en declive y, tal vez, algún que otro filólogo que amase la poesía. Un antiguo matadero municipal, reconvertido en centro cultural, sería el lugar más adecuado para la representación. Los poetas y las poetas, o viceversa, podrían finalizar el espectáculo masturbándose los unos a los otros.

La falta de talento y el insomnio, provocan un acercamiento a las vanguardias o la majadería, disfrazadas de cualquier cosa que plazca a los críticos de Babelia.

Este texto lo publiqué en marzo, pero lo recordé después de una conversación sobre la creación literaria con una devota del oficialismo cultural, que cree firmemente en el arte banalizado,  sostenible  y de exquisito diseño . Quiero decir con esto, que es de las que cree que Almodóvar es un gran cineasta y Ray Loriga un gran escritor, olvidando a Erice, por ejemplo.
Ha muerto, hace unos días, Miguel Ángel Velasco, el gran poeta mallorquín del que nadie hablaba:

A cuatro días de morir el viejo
Me he ido, solo, a bailar
-a cuatro días, ni uno más ni uno menos-,
a una gruta de esas:
luces estroboscópicas y músicas de trance.
Pensando en el albur
de encontrarme de nuevo a los dos rusas
de la estancia pasada, Ira e Inna,
de una ternura audaz, y repetir
aquello tan conforme de los tres en la cama,
mirándolas beberse en los desmayos
de mi virilidad. Olvídate,
ya no las verás más a Ira e Inna;
recordarás tan sólo, agradecido,
esa lujuria santa.
Mientras ya van tres cápsulas
de Semilanceata,
esos hongos salvajes
que te aceitan las vértebras. Y bailas,
bailas como un poseso
a los treinta y cinco años de tu edad,
con los ojos cerrados,
enhebrado en el ritmo,
multiplicado en brazos y figuras
como un derviche ido.
Contra la muerte bailas, contra la puta muerte,
por ese bulto rígido de tu viejo en el féretro,
por su rostro amarillo.
Si algo quieren que vengan las bacantes,
que se planten delante,
a ver si alguna hay que también baile
contra la muerte hoy,
multiplicándose en fatalidad,
descoyuntada en varias,
haciéndose una lámina vibrante
herida del destino,
puro mimbre... si no
para otra bailaré. Porque esta noche
contra la muerte bailas,
como un fragmento suyo desatado,
como su cola eléctrica, amputada,
de lagarto amarillo.

Mallorca Revisited, de Miguel Ángel Velasco.

sábado, 16 de octubre de 2010

Poesía - Jorge Arbenz

Nunca me darán el Adonais
porque soy aburrido pálido Me
distraigo por la calle visto mal no
llevo chalecos de bohemio Y mi
trabajo es una mierda
Si una periodista tratase de
entrevistarme me interesarían más
sus bragas que otra cosa A ella
no le interesaría nada Nunca
me darán el Adonais o una palmada
en la espalda porque no salgo
por la noche me gusta la escenografía
católica Vivo en Barcelona
que a la poesía es como Cuenca 
Me masturbo demasiado Tomo
infusiones de valeriana sudo
No hablo idiomas Me callo
siempre me callo El silencio
es un cuchillo en mi garganta
se atoran las palabras
Yo luego las escribo y me callo
Nunca me darán el Adonais y
me gusta Clara Lago que nació
cuando cumplía yo los veintiséis
años

En el parque

  A veces, al cruzarme con un grupo de preadolescentes, hay uno que va como aislado, con cara de no saber donde meterse - y, generalmente, es así-, rara vez habla con las chicas, rara vez está en el centro de la diversión. Cuando eso pasa no puedo evitar una mirada de afecto y pienso: " Algún día te liberará la poesía".

martes, 12 de octubre de 2010

Sopa de atún

Cuando era pequeño, cada comida de Año Nuevo se celebraba en casa de mi tía con menú invariable: sopa de atún, pollo relleno y turrones de calidad dudosa, tal y como correspondía a las modestas posibilidades de la familia.
Una absurda disputa familiar, primero, y la larga enfermedad de mi padre, después, nos llevaron a no visitar la casa de mi tía durante más de veinte años, aunque manteníamos el contacto y la costumbre de celebrar la comida de Navidad en la nuestra, lo que es verdaderamente paradójico; pero así fue hasta el lunes, cuando mi madre me pidió que la acompañara para visitar a su hermana, con la peregrina excusa de ver su nueva cocina - algo que, en el caso de mi madre, no era tan peregrino-.

Para llegar a casa de mi tía, se puede dar un paseo por una zona muy cuidada, ahora, por las autoridades municipales, que no quieren estropear la primera impresión que producirá la ciudad a los viajeros que lleguen a ella en los trenes de alta velocidad. Han desaparecido las chabolas del poblado conocido como La Perona; se ha construido un parque de grandes proporciones, que cada tarde es tomado por los jóvenes miembros de las bandas latinas que abundan en el barrio, pero a las diez de la mañana es un lugar muy agradable, con nietos, abuelos y parados que disfrutan de la tranquilidad entre árboles, huertos vecinales y alguna pista de baloncesto o petanca.

No recordaba lo pequeño que era el piso, incluso para mí, que no sé lo qué es una casa grande, pero la sensación que tuve al entrar fue de mucha incomodidad. La cocina era como cualquier otra y los pormenores de la reforma, o la poca disposición para el trabajo de los albañiles, no me interesaban en absoluto. Me dirigí a una habitación llena de libros en desorden para curiosear un poco a costa de mi prima, maestra sin más afición que las series policíacas y la literatura cuya entidad no supere a Ken Follett o Paulo Coelho, pese a su notable biblioteca.
Entonces fue cuando, oh sorpresa, me di cuenta de que todavía conservaba uno de los libros que hicieron las delicias de largas tardes: El jorobado, de Paul Féval, que, como recordarán casi todos los que anden sobre la cuarentena, relataba las aventuras del caballero Henri de Lagardère, que se disfraza de sirviente jorobado para proteger a la bella Aurore, hija de su íntimo amigo Philippe de Nevers, asesinado por el malvado príncipe Philippe de Gonzague. Me pregunto sí hay alguien que no soñara, en alguna ocasión, en asestar la estocada Nevers a Gonzague o, al menos, a su profesor de matemáticas.

Siguiendo con una costumbre que adquirí hace años, comencé a acariciar el libro y a olerlo; el olor, sin duda alguna, era el de la sopa de atún que cada año nos daba mi tía, y enseguida vinieron a mi memoria aquellas comidas interminables, las discusiones sobre quién compraría el roscón de Reyes, la insistencia de mi tía para que todo el mundo repitiera plato de sopa, hecha con atún enlatado y puré de patata, pero que a mí me parecía un manjar delicioso. Como una costumbre sigue a otra, me saltaron las lágrimas.
Supongo que estoy atrapado en demasiadas nostalgias, que es algo muy malo, pero le cogí el libro a mi prima sin permiso ni ánimo de devolverlo, que es igual de malo pero menos nocivo.

Los libros siempre han sido un buen refugio, el mejor posible para un introvertido y tímido como yo. Todo esto me hubiera gustado explicárselo a alguien que nunca leerá este blog, así que lo dejo aquí para los viajeros. Me voy a coger la espada.

El triunfo de la voluntad ( Leni Riefensthal - 1934)


A veces, podemos tener dudas sobre el concepto de belleza, al que adjudicamos de manera casi inconsciente, la característica de bondadoso. Esta película, una de las más hermosas que se han rodado en toda la historia del cine, cuestiona radicalmente ese planteamiento. Se describe el congreso que los nazis celebraron en Nuremberg en 1934, el primero desde su llegada al poder. En él, Adolph Hitler trazará las líneas maestras de lo que será el horror nazi, la locura que durante una década sacudirá a Alemania y al mundo. Nadie pensaba en eso en la Alemania resentida y humillada de 1934, que veía en ese austríaco histriónico, el mesías que devolvería a Alemania al lugar que le correspondía.

Para explicar este proceso, Riefensthal, utiliza un instrumento perfecto y bellísimo. Todo en este documental, es inatacable desde el punto de vista estético: la fuerza de las imágenes, la exquisitez del montaje, la banda sonora más que adecuada, la consecución de casi todos los objetivos de la obra: nadie parece más fuerte, más honesto, más jovial y más valeroso que el guerrero ario, el mismo que, cinco años después, aterrorizará a Europa.

Recomiendo mirar la obra con tranquilidad; despojados de carga ideológica, alguno de vosotros se sentirá turbado por la belleza de la película, incluso podrá entender la fascinación que ejercieron los nazis sobre un pueblo humillado. Será entonces, cuando podréis reflexionar largo y tendido sobre la propuesta ideológica de la película, porque se entiende mejor el peligro, lo fácil que puede resultar sucumbir.
Es mejor verla en soledad, si puedo aconsejarlo. Por cierto, el vídeo no es un fragmento, incluye toda la película ( el montaje conocido). Después de la guerra, Riefensthal no pudo volver a filmar nada, excepto algunos documentales sobre África estrenados después de su muerte.

domingo, 10 de octubre de 2010

Parlami d'amore, Mariú!

"Come sei bella più bella stasera Mariú!
Splende un sorriso di stella negli occhituoi
Blu!
Anche se avverso il destino domani sarà
Oggi ti sono vicini, perche sospirar?
Non pensar!

Parlami d'amore, Mariù!
Tutta la mia vita sei tu!
Gli occhi tuoi bella brillano
Fiamme di sogno scintillano
Dimmi che illusione non e
Dimmi che sei tutta per me!
Qui sul tuo cuor non soffro più
Parlami d'amore, Mariù!

Dimmi che illusione nion e
Dimmi che sei tutta per me!
Qui sul tuo cuor non soffro più
Parlami d'amore
Parlami d'amore
Parlami d'amore, Mariù!"




Canción cantada por Vittorio de Sica en la película "Gli uomini, che mascalzoni!" dirigida por Mario Camerini en 1932, tuvo un gran éxito en la Italia lúgubre de Mussolini. Aquí os dejo la escena original, de poca calidad. Pero la canción es fantástica.

sábado, 9 de octubre de 2010

Vida laboral

- Mi economía flaquea, nos pagan sueldos de miseria.
- ¿ Ha pensado en buscar otro trabajo?
- Sí, pero no encuentro nada.
- Hágase mariscal de Francia.
- ¿ Con paga doble y días de libre disposición, amén de las vacaciones inherentes al cargo?
- Sí.
- ¡ Granaderos de la Guardia ( francesa), saludad a vuestro ( nuevo) mariscal! Esto es maravilloso, no imagina cuanto le agradezco la sugerencia: le nombro vicemariscal y jefe de cocina.
- Por favor, cuánto honor ¡ deme un beso!
- ¡ Los cojones, le voy a dar un beso!
- Uiggg, qué soso...

jueves, 7 de octubre de 2010

Las cosas de la vida


El pasado tres de octubre se celebró en Calafell, provincia de Tarragona, un triatlón que congregó a más de tres mil espectadores y cuatrocientos participantes - según la organización o, al menos, alguien que tenía pinta de pertenecer a ella-.
Como a mí no me gustan estas cosas del cansarse y sudar, salvo que estén relacionadas con alguna práctica sexual placentera, me fijé en algunas ( cosas) menos apegadas al espíritu olímpico, por ejemplo: eran mucho más aplaudidas las deportistas femeninas que sus compañeros varones - y no sólo eso, las atletas que más entusiasmo despertaban eran las que tenían las tetas más grandes, así de simple-.
Esta extraña concepción del apoyo moral al atleta se repetía en la carrera ciclista, volviendo a ser las mujeres más jaleadas que los hombres, siguiendo esta vez el nada ortodoxo criterio del atractivo del culo. Cabe señalar la disparidad de opiniones que se produjo en varios momentos de la disputada prueba.

En lo que todo el mundo estuvo de acuerdo fue en abuchear a los Mossos d' Esquadra, la simpática policía autonómica de Cataluña, y, cada vez que se aproximaban a la zona más animada del público, eran recibidos con gritos favorables a la in-de-pen-den-ci-a, in-de-pen-den-ci-a, haciendo caso omiso, en honor a la verdad, del atractivo culotetil de los/as agentes.

A título anecdótico, me parece oportuno señalar el elevado porcentaje de turistas extranjeros,que se sumaron al saludable deporte de meterse con la autoridad. Me pareció una metáfora de la Cataluña convergente que se avecina, en la que nada será lo que parezca.

domingo, 3 de octubre de 2010

Notas de un blogger

1.- La miseria se hace visible en todos los barrios de la ciudad, incluso en los pudientes.
2.- Cierra los ojos y escucha ( rumor de las olas)
3.- El antiguo Barrio Chino de Barcelona se hunde, pese a los absurdos esfuerzos del Ayuntamiento, que sólo piensa en hoteles y tiendas de lujo ( enlazaría ésta, con la nota 1)
4.- El mundo ha descubierto, a causa de una caída, que Sara Carbonero lleva bragas - ha sido la gran noticia de algunos medios llamados serios-. Empiezo a sentir una cierta simpatía por esta chica.
5.- Bollo preñao: ummmmhhh...
6.- Soy sensible y no acaba de gustarme, aunque lo valoro, pero no mucho, no sé...Dudo.
7.- A propósito de la nota 2: Por las mañanas, apenas ha asomado el Sol, el mar no arrulla, late.
8.- Tomás Gómez ha derrotado a Trinidad Jiménez en las primarias socialistas de Madrid, para regocijo de los enemigos de las primarias y Esperanza Aguirre.
9.- Una holandesa se balanceaba...¿ o no era una holandesa?
10.- Se han vendido 45 ejemplares de mi único libro. Esto es algo que, lejos de toda ironía, considero un milagro o similar.
11.- Necesito que me toque la lotería para dejar de trabajar.
12.- En el tren le he mirado las tetas a una chica y una señora con un perro grandísimo - y mansurrón- se ha sentado frente a mí.
13.- Me voy a Madrid en diciembre...me gustaria irme a Madrid en diciembre...tal vez pueda irme a Madrid en diciembre. Calamares.
14.- Leo en una pared : " Las pajas dan más gusto en la cama que en el lavabo". Estoy sensiblemente de acuerdo con la afirmación.
15.- El Ayuntamiento de Barcelona ha vuelto a organizar una exhibición de vuelos acrobáticos militares, para cerrar la temporada de fiestas veraniegas. Me cisco en el Ayuntamiento de Barcelona.
16.- Los antisistema han vuelto a arrasar el centro de Barcelona, para que todos veamos lo valientes y revolucionarios que son. Me cisco en los antisistema.
17.- Me quiero poco y los mosquitos lo notan.
18.- Las notas no se contestarán de una en una por parte del editor del blog ( bis)
19.- Debería haberla llamado, pero la realidad se volvió a manifestar de mala manera.
20.- Si se dan las circunstancias para que se publique un nuevo libro con mis poemas, promoveré una campaña para que mis admiradoras me envíen fotos de espaldas y en bragas, para la portada. Me parece de lo más fetichista y alimentará el morbo de los compradores...a ver sí llego a los 46 ejemplares.
21.- Por cierto, he vuelto.