Avanzando por la senda que nos ha de llevar a la Edad Media, el Gobierno ha dispuesto que los parados que cobran la prestación por desempleo o alguna otra ayuda, podrán ser "usados", esto es literal, en las tareas de extinción de incendios y limpieza de zonas quemadas.
Modestamente propongo, como parado que desea volver a ser persona, que las mujeres paradas que cobran prestación, se pongan a parir como conejas, siguiendo la doctrina de ese prohombre de la cultura y las artes que es el exministro Mayor Oreja. Asimismo, podrían envasar su propia leche y venderla para no representar una carga al Estado que les permite vivir bajo su cielo y sobre su suelo.
Ya puestos, no estaría de más considerar la reintroducción de los combates de gladiadores en las fiestas mayores de los pueblos y ciudades de España.
Casi seis millones de parados dan para mucho.