No me asombra la facilidad que tienen jóvenes cargos electos del PP para insultar y amenazar a personas de otras ideologías, porque lo llevan en el ADN de una derecha que sigue venerando a Franco, pero es que los dirigentes que se prentenden de centro les ríen las gracias. Y eso sí es muy inquietante, porque muestra el "talante" de los que van a tener responsabilidades, directas, de gobierno.