domingo, 30 de marzo de 2014

Poesía - Jorge Arbenz

Sueño
Me despierto
No sé nada
Sueño sueño
Despierto no sé nada

Solo en el sueño vivo
Solo en el sueño sé

Que cuando no sueño muero y despierto nada sé

viernes, 28 de marzo de 2014

Poesía - Jorge Arbenz

Tan solo regresaría a la
escuela para poner

la zancadilla

a todos aquellos
de apellido ilustre

que el tiempo

iba a convertir
en hombres de provecho

jueves, 27 de marzo de 2014

Poesía - Jorge Arbenz

Hace tiempo que no he ido
a la casa de tus abuelos Y
ahora

con
la tierra a su alrededor encendida
las
ventanas que nos miraban

se esconderán
para siempre tras
la ceniza


jueves, 6 de marzo de 2014

La cuádruple forma de la nada - Leopoldo María Panero

Yo he sabido ver el misterio del verso
que es el misterio de lo que a sí mismo nombra
el anzuelo hecho de la nada
prometido al pez del tiempo
cuya boca sin dientes muestra el origen del poema
en la nada que flota antes de la palabra
y que es distinta a la nada que el poema canta
y también a esa nada en que expira el poema:
tres son pues las formas de la nada
parecidas a cerdos bailando en torno del poema
junto a la casa que el viento ha derrumbado
y ay del que dijo una es la nada
frente a la casa que el viento ha derrumbado:
porque los lobos persiguen el amanecer de las formas
ese amanecer que recuerda a la nada;
triple es la nada y triple es el poema
imaginación escrita y lectura
y páginas que caen alabando a la nada
la nada que no es vacío sino amplitud de palabras
peces shakespearianos que boquean en la playa
esperando allí entre las ruinas del mundo
al señor con yelmo y con espada
al señor sin fruto de la nada.
Testigo es su cadáver aquí donde boquea el poema
de que nada se ha escrito ni se escribió nunca
y ésta es la cuádruple forma de la nada.

domingo, 2 de marzo de 2014

Sobre Puig Antich, cuatro palabras.

Hoy se cumplen cuarenta años del asesinato de Salvador Puig Antich; como no podía ser de otra manera, todas las fuerzas políticas con posibilidades de reivindicar su figura, lo han hecho sin ruborizarse.

Me gustaría apuntar dos o tres cosas: Puig era anarquista y nunca se llevó especialmente bien con los comunistas, que lo consideraban un burgués advenedizo; tampoco era nacionalista ni nada remotamente parecido. A los que se reclaman herederos, rizando el rizo más de lo deseable, porque era un combatiente, será bueno recordarles que él y su grupo combatieron poco y mal, dada su "preparación" y penuria de medios. Tampoco era un hombre valiente, lo que engrandece su figura: los valientes acostumbran a estar cerca de la irresponsabilidad o la inmadurez, y Puig siempre tuvo presente la posibilidad de dejarse la vida en el empeño.
Acabo: le gustaba divertirse y tenía éxito con las mujeres, otra cosa que no le perdonan los que lucharon contra el franquismo desde su habitación o algún bar, estudiando a Gramsci y hablando sobre él, a ver qué pillaban.

Dicho todo esto, espero que la querella presentada en Argentina siga su curso hasta el final y el gobierno español se vea obligado a indemnizar a la familia de Puig como lo que es, la familia de una víctima del terrorismo de estado.

Salut,company, descansa.

sábado, 1 de marzo de 2014

Brevísima referencia a Ana María Moix.

Se ha ido Ana María Moix, escritora y editora que vivió los años dorados de la "gauche divine", ese grupo de hijos de la alta burguesía catalana que buscó el desmarque del entorno sociopolítico a través de la cultura, el arte y una vida personal muy alejada de los cánones establecidos por el régimen.

Moix, durante años la hermana de Terenci y nada más, fue una más que notable poeta, narradora, periodista y, sin duda, una de las mejores editoras españolas. Formó parte de los Novísimos de Castellet.
También deben contarse en su haber el impulso al llamado "boom" de escritores latinoamericanos (Vargas Llosa, García Márquez, Cortázar, Fuentes, Paz, etc.) que se pasearon por Barcelona de la mano de Moix y de Carmen Balcells.

Pese a su estatura literaria, dedicó buena parte de su tiempo a reivindicar la obra de su hermano Terenci, al que estaba muy unida.
Con la Nena, como todavía era conocida, se arranca otro jirón de la Barcelona mítica de los sesenta y setenta, pija y mirándose al ombligo más de la cuenta, cierto, pero con una curiosidad insaciable por todo lo que venía de fuera.

Descanse en paz.