domingo, 29 de noviembre de 2009

The Collector ( William Wyler - 1965)


Freddy Clegg - Terence Stamp, en uno de sus mejores trabajos- trabaja en un banco, es un apocado y solitario coleccionista de mariposas, al que un día le sonríe la suerte y gana una fortuna en las quinielas. Se siente fuertemente atraído por la joven Miranda Grey, una estudiante de Bellas Artes muy atractiva - Samantha Eggar, una actriz notable de carrera irregular- , a la que acaba secuestrando con la intención de que ella se enamore. Freddy se ha comprado una agradable casa en el campo, que espera compartir algún día con ella. Mientras tanto, la ha encerrado en el sótano.

Freddy es un sociópata de manual, lleno de complejos y sin habilidades sociales; encerrado en sí mismo como defensa frente a un mundo que cree hostil.
El tiempo no arregla nada, tal y cómo pensaba que haría Freddy. Miranda no es dócil, ni se deja manipular como las mariposas de su colección. Esto trastornará todavía más a Freddy, que acabará provocando la muerte de Miranda.

William Wyler - "La loba", "Ben-Hur", "La heredera", "Horas desesperadas", entre otras varias grandes películas- nos regala una obra maestra al final de su carrera, muy alejada del tono habitual de sus películas. "El coleccionista" es introspectiva, profundizando en el interior de Freddy, diseccionándolo. Reflexiona de manera cruda sobre la soledad, sobre el deseo, sobre la necesidad de tener algo que nos haga merecer la admiración de los otros. Freddy no es un personaje antipático, de hecho crea más empatía él que Miranda, en un punto de vista muy arriesgado - sobre todo para la época-.

El trabajo de los dos actores protagonistas es excepcional, y sólo por ellos merecería verse esta película. Pero hay muchas más y buenas razones.
La película ha soportado varias imitaciones, entre ellas la muy conocida "Átame", de Pedro Almódovar, con Antonio Banderas y Victoria Abril en los papeles principales...no hace falta añadir nada más.