«General, vigile a su hija: ha intentado sentarse sobre mis rodillas cuando yo aún estaba de pie». Phillip Marlowe.
sábado, 22 de mayo de 2010
Legítima defensa
Debe quedar claro que el señor que acaba con la boca abierta, tenía intención de clavarle la espada al toro, que no le había hecho nada y que se defiende como haría cualquier hijo de vecino...con un peso superior a 500 kilos.